Información adicional sobre Junta, Entrada Aceite (Turbocompresor)
Junta de entrada de aceite del compresor
La junta de entrada de aceite del compresor asegura la estanqueidad entre la tubería de lubricación y el cuerpo del compresor, ya sea un turbocompresor o un compresor de aire acondicionado con cojinete lubricado. Colocada en el punto de conexión de la alimentación de aceite, impide cualquier fuga bajo presión y garantiza que la cantidad necesaria de aceite llegue a los cojinetes internos. Sin esta pequeña junta, la bomba de aceite pierde presión, el aceite se escapa, los cojinetes se secan y el compresor termina por griparse. La junta es generalmente una arandela de cobre, un anillo tórico NBR o FKM según la temperatura y la viscosidad del aceite. En servicio, trabaja bajo alta presión (hasta 5 bar del lado del motor) y a temperaturas que pueden superar los 180 °C a la salida del bloque. Su función es, por tanto, crucial: mantener la película de aceite, aislar el aire exterior y evitar la introducción de impurezas en el circuito.
¿Cuándo cambiar la pieza?
- Duración de vida aproximada: 150 000 km o de 8 a 10 años, pero depende del número de desmontajes del compresor.
- Signos de advertencia:
- Rastros de aceite fresco alrededor de la conexión de alimentación.
- Mancha de aceite en el suelo después de detener el motor.
- El nivel de aceite baja más rápido de lo habitual sin otra fuga aparente.
- Película aceitosa en la carcasa del turbocompresor o en la carcasa del aire acondicionado.
- Luces y alertas: la luz de presión de aceite puede encenderse en ralentí, señal de que una fuga disminuye la presión.
- Periodicidad recomendada:
- En cada desmontaje/montaje del compresor o de la manguera de alimentación de aceite.
- Durante el mantenimiento mayor del turbo (revisión, reemplazo CHRA).
- Ante cualquier duda después de un sobre régimen, un sobrecalentamiento o el uso de un aceite inapropiado.
¿Por qué cambiarla?
- Evitar la pérdida de presión de aceite: una fuga de un simple milímetro puede hacer caer la presión y privar a los cojinetes de su película lubricante, provocando un rápido gripado.
- Preservar el compresor: una junta de entrada de aceite defectuosa favorece el desgaste de los rodamientos y los anillos, aumentando el juego axial y el ruido de silbido.
- Proteger el motor: el aceite que ya no llega al compresor regresa caliente al cárter, se oxida y degrada sus propiedades, con un riesgo de agarrotamiento generalizado.
- Limitar el consumo y la contaminación: una fuga externa provoca humo azulado en el escape, un ensuciamiento del compartimento del motor y una revisión fallida en la inspección técnica.
- Seguridad y coste: reemplazar la junta de entrada de aceite del compresor cuesta unos pocos euros y evita una factura de varios cientos o incluso miles de euros por un compresor o un turbo nuevo.