Válvula, Bomba de Vacío: Compre sus piezas de automóvil a precios bajos

Válvula de bomba de vacío

La válvula de bomba de vacío es la pequeña válvula interna que regula la circulación de los gases en la bomba para crear la depresión indispensable para el servofreno, los actuadores de turbo de geometría variable y, a veces, para los sistemas antipolución. Situada directamente en el cuerpo de la bomba, generalmente fijada en la culata o al final del árbol de levas, actúa como un compuerta: se abre para dejar pasar el aire durante la aspiración y luego se cierra instantáneamente para evitar cualquier retorno. Su membrana, a menudo de acero nitrurado o elastómero de alta temperatura, se apoya en un resorte calibrado que garantiza la estanqueidad incluso a más de 90,000 rpm de rotación de la bomba. Sin esta válvula de bomba de vacío, la bomba cavitaría, perdería su capacidad de aspiración y permitiría que el aire atmosférico invadiera el circuito de depresión.

¿Cuándo cambiar la pieza?

• Duración de vida media: entre 150,000 y 200,000 km en un motor mantenido, pero puede desgastarse más rápido en trayectos urbanos frecuentes.
• Signos y síntomas:
  • Pedal de freno endurecido porque el servofreno ya no recibe suficiente vacío.
  • Encendido de un testigo "freno" o "depresión insuficiente" en algunos vehículos modernos.
  • Zumbido o clics provenientes de la bomba, señal de que la válvula está funcionando anormalmente.
  • Pérdida de potencia en motores turbo si la geometría variable ya no puede ser controlada.
• Periodicidad aconsejada: control visual y prueba de mantenimiento del vacío cada 60,000 km o en cada reemplazo de correa de distribución, reemplazo preventivo ante la mínima fuga o ruido sospechoso.

¿Por qué cambiarla?

• Mantener una depresión estable: en cuanto la válvula de bomba de vacío presenta una microfisura o un resorte debilitado, la bomba pierde hasta un 70 % de su eficacia. El frenado se vuelve inconsistente, creando un riesgo inmediato para la seguridad.
• Evitar el sobrecalentamiento de la bomba: una válvula defectuosa provoca un trabajo en carga permanente. La bomba se calienta, el lubricante se quema y los engranajes se desgastan prematuramente, lo que puede llevar a la rotura completa de la bomba.
• Proteger el turbo y las electroválvulas: sin una depresión correcta, la electroválvula de control de geometría variable tira demasiado fuerte para compensar. Puede atascarse, aumentando el consumo y emitiendo más partículas.
• Limitar las emisiones contaminantes: algunos sistemas EGR de baja presión utilizan el vacío. Una válvula defectuosa desajusta el EGR, aumentando los NOx y provocando un fallo en la inspección técnica.
• Preservar el presupuesto: el reemplazo preventivo de la pequeña válvula cuesta unas pocas decenas de euros, mientras que una bomba de vacío completa, un servofreno o un turbo dañados pueden superar los mil euros.