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Interruptor de bloqueo de diferencial
El interruptor de bloqueo de diferencial es el control eléctrico que activa el bloqueo mecánico del diferencial. Instalado en el tablero de instrumentos o en la consola central, envía un impulso hacia la electroválvula o el motor que comanda el bloqueo. Cuando presionas el botón, los satélites internos del puente se inmovilizan, transmitiendo así la misma rotación a las dos ruedas motrices. Esto mejora la tracción en barro, nieve o cruces de puentes. Sin este interruptor, el conductor no puede activar el bloqueo de manera precisa y segura.
El circuito incluye un indicador luminoso que confirma la activación. El interruptor de bloqueo de diferencial trabaja en un entorno sometido a vibraciones, polvo y variaciones de temperatura. Con cada accionamiento, los contactos internos aseguran el cierre del circuito; con el tiempo, estos contactos pueden oxidarse o deformarse, alterando la fiabilidad del control.
¿Cuándo cambiar la pieza?
El mantenimiento preventivo de este componente es raro, pero algunos indicios permiten anticipar su reemplazo antes de que falle.
- Vida útil promedio: 8 a 12 años o 150 000 km en uso en carretera, más corta en todoterreno intensivo.
- Síntomas de desgaste: indicador que ya no se enciende, ausencia de clic al tacto, necesidad de presionar fuerte o varias veces, activación errática del bloqueo.
- Control visual: rastros de humedad, fisura del plástico, conector quemado.
- Periodicidad de verificación: en cada mantenimiento del puente o antes de un raid/competición.
- Prueba funcional: accionar el interruptor con el motor en ralentí, escuchar el enclavamiento y observar el indicador.
¿Por qué cambiarlo?
Un interruptor de bloqueo de diferencial defectuoso puede parecer inofensivo, pero las consecuencias van más allá de una simple molestia.
- Pérdida de tracción: sin bloqueo disponible, tu vehículo puede quedar inmovilizado en un terreno blando.
- Desgaste acelerado: si el contacto permanece pegado, el diferencial puede permanecer bloqueado en carretera, provocando tensiones en los ejes y neumáticos.
- Seguridad comprometida: la activación inesperada en una curva aumenta el riesgo de trompo.
- Diagnósticos erróneos: un bloqueo que ya no responde puede confundirse con una falla del puente, llevando a reparaciones costosas.
- Conformidad legal: algunos controles técnicos señalan un indicador de bloqueo inoperante, posible motivo de una segunda inspección.
Reemplazar el interruptor de bloqueo de diferencial ante los primeros signos asegura un control fiable, protege la transmisión y preserva la seguridad del conductor y los pasajeros.