Tornillo, Pinza de Freno: Compre sus piezas de automóvil a precios bajos

Tornillo de pinza de freno

El tornillo de pinza de freno es el perno de fijación que une la pinza al soporte del husillo o a la mordaza flotante. Colocado en la parte trasera del disco, recibe un par de apriete preciso para mantener la pinza en posición mientras soporta los esfuerzos de frenado. Algunas referencias también sirven como eje de deslizamiento: guían el desplazamiento lateral de la pinza flotante para que las pastillas aprieten el disco de manera simétrica. Fabricado en acero de alta resistencia, resiste las tensiones térmicas y mecánicas generadas durante los frenados repetidos. Un freno de rosca o un tratamiento geométrico limita el aflojamiento y la corrosión.

En circulación, este tornillo de pinza sufre:

• fuertes variaciones de temperatura (–20 °C a más de 200 °C);
• vibraciones continuas transmitidas por el buje;
• proyecciones de agua, sal y partículas abrasivas susceptibles de corroer su rosca.

Un apriete al par prescrito y el reemplazo sistemático durante un desmontaje garantizan la fiabilidad del sistema de frenado.

¿Cuándo cambiar la pieza?

La vida útil de un tornillo de pinza de freno depende de su exposición a la corrosión y del número de desmontajes. En uso normal, puede durar de 5 a 10 años, pero debe ser reemplazado en cada intervención en la pinza para asegurar el apriete.

• Después de dos reemplazos consecutivos de pastillas si el tornillo no ha sido renovado.
• Si la rosca aparece oxidada, desgastada o contaminada por virutas.
• Cuando el par de apriete nominal ya no se alcanza (rosca que gira en vacío).
• En presencia de chasquidos, vibraciones o un juego lateral de la pinza.
• Tan pronto como se observe un goteo de grasa de deslizamiento o una fuga de líquido alrededor de la cabeza.

Periodicidad aconsejada: control visual en cada servicio de frenos (aproximadamente cada 30,000 km) y reemplazo sistemático al abrir el circuito o al cambiar los discos.

¿Por qué cambiar?

• Un aflojamiento o rotura del tornillo de pinza puede provocar un desplazamiento de la pinza, causando una pérdida parcial o total de la potencia de frenado.
• Una rosca corroída distorsiona el par aplicado; la pieza puede cortarse bajo tensión.
• Un tornillo reutilizado sin un freno de rosca nuevo corre el riesgo de vibrar y dañar la mordaza, lo que lleva a reparaciones más costosas.
• Mantener un apriete correcto asegura un desgaste regular de las pastillas y del disco, prolongando la vida útil de los componentes asociados.
• Reemplazar este tornillo de fijación previene ruidos parásitos, mejora la respuesta del pedal y garantiza el cumplimiento de las normas de seguridad vial.

Invertir en un tornillo de pinza de freno nuevo en cada intervención es, por lo tanto, una medida simple y económica para asegurar todo el sistema de frenado.