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Contacto de advertencia de desgaste de pastillas de freno
El contacto de advertencia de desgaste de pastillas de freno es un pequeño sensor eléctrico montado directamente sobre el revestimiento de la pastilla o, según el vehículo, insertado en un alojamiento en la superficie del soporte metálico. Conectado mediante un cable al calculador o al cuadro de instrumentos, cierra o abre un circuito cuando el revestimiento alcanza un umbral crítico (aproximadamente 2 a 3 mm). El tablero de instrumentos muestra entonces una luz de advertencia, avisando al conductor que es momento de reemplazar las pastillas.
Colocada lo más cerca posible de la superficie de fricción, esta pieza detecta el desgaste real: tan pronto como el roce alcanza el cable o la pista conductora, se envía la señal. A diferencia de una inspección visual aleatoria, el contacto de desgaste proporciona información instantánea y fiable; es el primer eslabón del mantenimiento predictivo del sistema de frenado. El dispositivo se presenta en varias formas (cable de una vía, sensor de dos cables, sonda electrónica) y siempre es específico para cada eje y cada referencia de pastilla.
¿Cuándo cambiar la pieza?
El contacto de advertencia de desgaste de pastillas de freno no es una pieza de desgaste en sentido estricto, pero sufre agresiones térmicas y mecánicas constantes. Por lo tanto, debe ser reemplazado en varias situaciones:
- En cada cambio de pastillas: la mayoría de los fabricantes recomiendan renovar el sensor junto con el juego de revestimientos.
- Si el cable está cortado, agrietado o arrancado durante una intervención.
- En presencia de oxidación del conector, fuente de falsas luces en el tablero de instrumentos.
- Después de un uso prolongado en condiciones severas (montaña, remolque regular).
Duración de vida indicativa: 60,000 a 90,000 km, variable según la calidad de la pastilla y el estilo de conducción. En un vehículo urbano, un control visual en cada revisión o a partir de 30,000 km es recomendable. Una luz encendida de forma permanente, a pesar de tener pastillas nuevas, suele indicar un sensor defectuoso.
¿Por qué cambiarlo?
Un contacto de advertencia desgastado o dañado distorsiona la información transmitida al conductor. Las consecuencias pueden ser serias:
- Pérdida de alerta: las pastillas llegan al metal; el disco se daña, la distancia de frenado se alarga.
- Activación intempestiva de la luz: estrés del conductor, diagnóstico erróneo, inmovilización innecesaria.
- Corte de circuito: en caso de cortocircuito, algunos calculadores pasan a modo degradado y desactivan el ABS.
- Corrosión en el conector: propagación al cableado del eje, costos de reparación multiplicados.
Reemplazar a tiempo el contacto de advertencia de desgaste de pastillas de freno preserva la eficacia del frenado, asegura el vehículo y evita el reemplazo prematuro de discos costosos. Un sensor nuevo garantiza una lectura precisa del nivel de desgaste, un funcionamiento óptimo de la luz de advertencia y un mantenimiento programado, sin sorpresas desagradables.
