Elemento esencial para el buen funcionamiento del motor, la función del aceite es protegerlo de la corrosión, reducir su temperatura y limitar la fricción entre las distintas partes mecánicas para prolongar su vida. Hay una gran selección de aceites en el mercado. A cada motor le corresponde un aceite específico, pero también hay que tener en cuenta otros criterios como la viscosidad y el tipo de motor.
La viscosidad
Durante el arranque, el índice de viscosidad muestra cuánto tarda el aceite en circular por el motor y sus diversos componentes. Es importante que el aceite, estando frío en el arranque, lubrique muy rápidamente todas las partes mecánicas. La letra W que significa «winter» (invierno) rodeada de 2 números (uno delante y otro detrás) le da pistas valiosas. El primer número identifica la fluidez en frío: si el número es pequeño, la fluidez será perfecta a bajas temperaturas. El número colocado después de la letra W da índices de la viscosidad para altas temperaturas. Si el número es grande, la viscosidad será ideal a altas temperaturas.
Los diferentes tipos de aceite de motor:
El aceite de motor mineral
Natural en cuanto a su composición, el aceite mineral se obtiene a partir del crudo refinado.
Es especialmente adecuado para vehículos con motores muy antiguos. Por otro lado, no será adecuado para vehículos recientes.
Monogrado, tiene un solo índice de viscosidad.
Incluso si se han agregado aditivos hasta la fecha, el aceite mineral todavía no se adapta a las variaciones de temperatura. Por lo tanto, solo se recomienda para automóviles antiguos.
El aceite de motor sintético
De origen químico, el aceite sintético proviene de diversas plantas, petróleo y aditivos, lo que le confiere a este aceite un rendimiento y unas propiedades cercanas a la perfección.
La diferencia entre la viscosidad en caliente y la viscosidad en frío es muy pequeña con el aceite sintético. Esto le permite ser viscoso en caliente cuando circula por los circuitos del motor, mientras que es fluido cuando arranca en frío.
Es, de lejos, la mejor calidad en comparación con el aceite mineral o semisintético. Este aceite es adecuado para vehículos recientes equipados con un filtro de partículas o uno turbo.
Una ventaja significativa: este aceite limita las emisiones de CO₂ y reduce el consumo de combustible.
Con sus múltiples ventajas, el aceite sintético se recomienda para viajes urbanos con arranques y paradas repetitivas.
El aceite de motor semisintético
El aceite semisintético es una mezcla entre aceite mineral y aceite sintético, pero no igual. La parte sintética de esta mezcla es variable, oscilando entre el 1 % y el 30 %.
Versátil y ampliamente utilizado por los automovilistas, el semisintético es reconocido por ser más económico y ofrecer propiedades vinculadas a los aditivos sintéticos.
Ofrece la mejor relación calidad-precio con buena compatibilidad con vehículos antiguos, recientes o incluso modernos.
Sin embargo, debe tenerse en cuenta que es menos duradero que un aceite sintético, se desgasta más rápidamente y requiere cambios de aceite más regulares.
