Caja de cambios automática: funcionamiento
Para los vehículos, existen dos tipos principales de transmisión: la caja de cambios manual y la caja de cambios automática.
Hay diferencias a tener en cuenta entre la caja de cambios manual y la caja de cambios automática. A nivel del conductor, por ejemplo, la palanca de cambios no es la misma y no hay pedal de embrague. Generalmente las cajas manuales tienen de 5 a 7 velocidades y hasta 10 velocidades en el caso de las cajas automáticas.
Un convertidor de par hidráulico realiza la función del embrague de disco, que patina y utiliza líquido para transmitir el par motor. En la práctica, los engranajes planetarios acoplados permiten cambiar de marcha automáticamente, y esto mediante un control electrónico e hidráulico que decidirá cuál es la marcha ideal.
Esta elección se hará en función de varios criterios: la disposición del pedal del acelerador, pero también la del selector de marchas (confort, deportivo, nieve, marcha atrás, normal, etc.), sin olvidar la velocidad de circulación del vehículo y su carga del motor. Se tienen en cuenta otros criterios mucho más específicos, pero de menor importancia.
En el mercado existen diferentes cajas de cambios automáticas:
- Con embrague simple: se trata de una caja de cambios automatizada que ya no se instala en los vehículos nuevos o recientes
- Con embrague doble: ofrece un rendimiento mucho mejor y ha terminado sustituyendo a la caja de un solo embrague
- Con convertidor de par: el convertidor de par hidráulico permite que el embrague funcione correctamente. Este último patina y comunica, con la ayuda de un fluido, el par motor. Los engranajes planetarios acoplados entre sí permiten cambiar de marcha mediante un control hidráulico y electrónico, que decidirá cuál es la marcha ideal.
- De variación continua: esta caja de cambios se utiliza principalmente en vehículos japoneses, quads y escúteres
Caja de cambios automática: ¿cuántas posiciones tiene?
Una caja de cambios manual necesita entre 5 y 7 marchas y una caja de cambios automática puede equiparse con hasta 10 marchas. Pero como las marchas se cambian solas, la caja de cambios automática en realidad no tiene 10 posiciones.
La caja de cambios automática generalmente tiene cuatro posiciones principales:
- P: esta es la posición de estacionamiento, parada cuando está estacionado
- N: es el punto muerto, neutro
- D: significa "drive" en inglés, la marcha hacia adelante habitual
- R: significa "reverso" o marcha atrás
Dependiendo del tipo de vehículo, puede encontrar otras posiciones como la posición S (sport), W (winter) y B de "brake" para "frenar", una especie de freno de motor presente en particular en los Toyota.
Caja de cambios automática estropeada: señales
En general, una caja de cambios automática tiene una vida útil larga, idéntica a la del vehículo. Solo tiene que cambiar el aceite de la caja periódicamente. Sin embargo, pueden aparecer signos de desgaste. Por lo tanto, la comodidad de conducción se verá fuertemente afectada. Además, puede ser peligroso conducir un vehículo con la caja de cambios averiada, ya sea automática o manual.
Estas son las principales señales de una caja de cambios automática defectuosa:
- Funcionamiento más lento: el cambio de marchas es más lento o más difícil.
- Presencia de tirones: significativos al arrancar que también se pueden sentir durante el trayecto.
- Ruidos inusuales: pueden ser chirridos o crujidos que se producen en el habitáculo.
- Repentino olor a quemado: al no tener suficiente aceite, la caja de cambios se sobrecalienta.
- Una fuga de aceite: la caja de cambios ya no está sellada y hay una fuga de aceite.
¿Cuándo se debe cambiar el aceite de una caja de cambios automática?
El aceite de la caja de cambios automática debe cambiarse de media cada 2 años cada 25 000 a 50 000 kilómetros. Esta frecuencia es bastante variable y depende de otros criterios: consulte el libro de mantenimiento del vehículo para comprobarlo.
Sin embargo, entre las recomendaciones a seguir, es responsabilidad suya revisar periódicamente el nivel de aceite en la caja de cambios. El aceite asegura una buena lubricación de los componentes de la transmisión. Se requiere una cantidad importante para su correcto funcionamiento.
La verificación del nivel de aceite de una caja de cambios automática se realiza de la misma manera que una caja de cambios manual. Esta operación se realiza en frío, y solo tiene que abrir el tapón de llenado de aceite, generalmente ubicado en la parte trasera del bloque motor. El nivel adecuado es hasta arriba, juste por debajo del tapón.
