El cigüeñal: su función
El cigüeñal, pieza central de su motor, transforma el movimiento lineal de los pistones del motor en un movimiento de rotación continuo, y viceversa. De este modo, se asegura la transmisión de energía de los cilindros al eje de salida del motor.
El cigüeñal también tiene otras funciones: accionar elementos del motor como el volante motor y la correa de distribución.
Varios elementos componen el cigüeñal: los cojinetes, los rodamientos, las bielas y los muñones.
- La unión entre los pistones y el cigüeñal está asegurada por las bielas. Estas hacen posible transformar el movimiento lineal en movimiento de rotación.
- La correcta rotación del cigüeñal es posible gracias a los muñones y los cojinetes que alinean y soportan los muñones.
- Los cojinetes, cuya función es reducir los golpes y la fricción, se encuentran entre el cigüeñal y las bielas. Los cojinetes también proporcionan lubricación al cigüeñal.
Cigüeñal en mal estado: ¿cuáles son las señales?
Un cigüeñal defectuoso o en mal estado, que ya no cumple correctamente su función, puede provocar averías en su vehículo.
Si su cigüeñal parece dañado, estas son algunas de las señales que deberían alertarlo:
- Cuando el cigüeñal está fuera de servicio, la luz del motor se enciende. Pero, cuidado, esta luz también se enciende cuando otras piezas están defectuosas. En el mejor de los casos, hay que acudir a un mecánico para que establezca un diagnóstico preciso.
- Si el cigüeñal está dañado, el sensor TDC (punto muerto superior) evitará que arranque el motor del vehículo.
- Si siente vibraciones en el embrague o si oye ruidos extraños en el capó, es posible que el cigüeñal esté defectuoso.
¿Cuándo debería considerar cambiar el cigüeñal?
Una pieza duradera en la mayoría de los casos, el cigüeñal no necesita ser reemplazado. Sin embargo, en ocasiones es necesario cambiar determinadas piezas que componen el cigüeñal, como las manivelas o las bielas, por ejemplo. En este caso, también será necesario cambiar el cigüeñal.
El mantenimiento deficiente del retén del cigüeñal provoca el deterioro prematuro del cigüeñal, que debe reemplazarse rápidamente.
Finalmente, si se rompe la correa de distribución, el cigüeñal se dañará y habrá que cambiarlo.