El objetivo del precalentamiento es calentar partes importantes del vehículo y mantener el habitáculo y la batería a una temperatura determinada. Esta característica no solo es muy útil para la comodidad, sino que también es una valiosa ventaja para la batería, que se puede usar a la temperatura ideal y ya no se necesita cuando está fría.
Así, una vez instalados, conductores y pasajeros podrán disfrutar plenamente del viaje.