El indicador de combustible, que funciona mediante un sensor, controla el nivel de combustible restante para advertir a los conductores del volumen de diésel, gasolina o gas disponible en el depósito. El sensor tiene la forma de un flotador también llamado "unidad de detección". Conectado a un potenciómetro, se incluye directamente en el depósito. En el salpicadero, un sistema electrónico equipado con un indicador está vinculado a esta unidad de detección para poder comprobar el nivel de combustible en cualquier momento. Cuando el depósito esté casi vacío y llegue a la reserva, se encenderá una luz roja o naranja.
El sensor de nivel de combustible, indispensable para controlar el consumo de combustible, no tiene un período de cambio preciso. Sin embargo, por razones obvias de comodidad diaria, es recomendable cambiar el indicador si aparecen las señales anteriores.