El aire acondicionado no es solo un ventilador, es mucho más complejo que eso. Es un circuito cerrado en el que circula un gas especial, al que se le llama refrigerante o fluido frigorígeno. Este gas ve su presión transformada mediante la compresión y expansión creadas por varias piezas del sistema de aire acondicionado. Estas reacciones físicas enfrían el aire expulsado por su aire acondicionado.
Así, determinadas piezas permiten este funcionamiento: compresores de aire acondicionado, condensadores, reductores de presión o evaporadores.
La función del compresor:
Como su propio nombre indica, un compresor de aire acondicionado es una pieza que aumenta la presión del gas refrigerante que circula en el sistema de aire acondicionado. El gas licuado a alta temperatura se puede evacuar hacia el condensador usando la correa de accesorios.
La función del condensador:
Gracias al aire ambiente y sus ventiladores, el gas caliente que sale del compresor se enfría a alta presión para convertirse en líquido.
La función del reductor de presión:
El reductor de presión juega un papel opuesto al del compresor. Disminuye la presión del gas licuado y provoca un descenso repentino de la temperatura. Por lo tanto, el líquido está frío, pero no lo suficientemente frío como para producir aire frío.
El papel del evaporador:
El evaporador, que es el último elemento del circuito de aire acondicionado, está situado a la altura del salpicadero y debe hacer que el líquido refrigerante se evapore en forma de gas. Esta conversión reduce la temperatura.
Si el aire acondicionado de su vehículo ya no enfría, hay varias posibles causas:
El sistema de aire acondicionado es complejo, sobre todo en los vehículos modernos, especialmente si es automático. Por esta razón, existen diversas causas de fallos en el sistema de aire acondicionado. Por ello, es importante saber cuándo y cómo realizar el mantenimiento del aire acondicionado.
No espere a que ocurra el problema. Las reparaciones pueden ser caras. Por lo tanto, le recomendamos que haga que un especialista controle el aire acondicionado de su vehículo al menos cada tres años.
Además, no olvide ponerlo en funcionamiento regularmente, incluso en invierno, durante al menos 15 minutos, por ejemplo, todos los meses. Esto evitará un fallo desagradable del sistema de aire acondicionado cuando se enciende en verano.
Por último, el mantenimiento del aire acondicionado también incluye la recarga. Hay que hacerla cada dos años de media, pero depende del uso.